jueves, 30 de diciembre de 2010

Introducción al estilo Románico


San Martín de Elines (Cantabria)


Empezamos una Ruta muy especial del Románico donde los alumnos de Historia del Arte de 2º de Bachillerato van a realizar unos estudios detallados de algunas obras significativas de este estilo.
Yo daré una sencilla introducción para trasladar el interés hacia un tiempo y un espacio marcado por el estilo Románico y así poder entender mejor nuestra Ruta.


San Martín de Frómista

El Románico es un estilo que se desarrolla entre los siglos XI y XII en una sociedad formada por un elevado número de campesinos analfabetos, pero dispuestos a creer las verdades que la Iglesia cristiana les enseña.
Y para que puedan creer mejor las representaciones complementarán con las imágenes las enseñanzas que la Iglesia quiere difundir. Ese es el sentido último de la escultura y la pintura románicas: servir de adoctrinamiento visual, empleando la imagen al servicio de la religión.



Recorriendo Europa occidental en torno al año 1000 nos encontramos por todas partes (salvo en Al-andalus) una importante decadencia de las ciudades y lo que predominan son las pequeñas comunidades asentadas en aldeas y villas, dedicadas a las tareas agrarias y, por lo común, sometidas al poder de un noble o de un monasterio.



El comercio se ha reducido mucho y los niveles de vida y cultura son enormemente bajos.
Es aquí, en este mundo de campesinos, donde va a desarrollarse el arte románico, el primero de los denominados estilos europeos, dada la difusión que alcanzó en una gran parte del occidente continental.



Castillo de Loarre


En estas comunidades aldeanas, dejando a un lado el castillo desde el cual el noble controla su feudo, un edificio único llamará nuestra atención: la iglesia.
Es de gran tamaño, está realizada en piedra y parece hecha para durar mucho tiempo, frente a las pobres viviendas campesinas.


La construcción simboliza, por un lado, a la comunidad que la ha levantado y que en ella se reúne para celebrar la misa de los domingos; por otro, representa, sobre todo, el poder de la Iglesia (ahora con mayúscula), que se ha ido incrementando notablemente a lo largo de los seis siglos anteriores.



Otro de esta importancia del fenómeno religioso en la sociedad altomedieval europea el Monasterio.
Los Monasterios están dispersos por el territorio y organizados como auténticas células autosuficientes.

A finales del siglo XII, comprobaremos que este arte románico se ha extendido también a las ciudades, sobre todo a aquéllas que se hallan asentadas en las rutas de peregrinación. En ellas, la iglesia se ha convertido en catedral y su tamaño ha aumentado considerablemente.

En el Románico la arquitectura juega un papel fundamental, mientras que la escultura y la pintura se supeditan a ella.
El templo románico sintetiza a la perfección la mentalidad de una época y de unos hombres para quienes Dios (y, por tanto, la Iglesia cristiana, que lo representaba en la tierra) era el supremo poder, más allá de las fuerzas temporales que los nobles o los propios reyes pudiesen suponer.

En este espacio iré marcando una serie de pautas para conocer mejor nuestra ruta y los alumnos irán aportando sus trabajos que estarán dentro de ese camino.
Os invito a visitar este enlace que os puede abrir el camino hacia el más importante de los caminos EL CAMINO DE SANTIAGO